Las habitaciones en Windsor Opera son únicas y tienen todo lo que necesitas. Me encantó el baño privado con bañera o ducha, y la televisión de pantalla plana con radio y pronóstico del tiempo. Es cómodo y acogedor, perfecto para relajarse después de un día de turismo por París.

Aunque disfruté de mi estancia, en mi opinión personal, me gustaría que las habitaciones tuvieran más opciones de entretenimiento, como acceso a películas o canales internacionales.

El cuarto es grande, con una bañera, un desayuno estupendo. El personal es muy atento y también inteligente, te ofrecen un servicio excelente. El hotel está siempre muy limpio y además tiene una ubicación céntrica cerca del metro. Además, está lo suficientemente cerca del centro de la ciudad y de restaurantes y tiendas y de del centro.

Personal inútil!

Una estancia encantadora

Entrar al Windsor Opera fue como viajar en el tiempo y encontrarme en el esplendor del pasado. Este hotel es un verdadero embajador del estilo y la comodidad, ofreciendo a sus huéspedes una experiencia única. Cada habitación tiene su propio encanto y elegancia, siendo un testimonio de la historia del hotel. Además, la ubicación es perfecta para explorar París, con fácil acceso a lugares como Montmartre, el Centro Pompidou y el Museo del Louvre. También hay muchas tiendas nostálgicas en Passage Jouffroy, lo que hace que sea una gran oportunidad para ir de compras y disfrutar de eventos culturales en el barrio. Sin olvidar, por supuesto, el servicio amable y atento de la recepción las 24 horas y la conexión Wi-Fi gratuita. ¡Definitivamente recomendaría este hotel a cualquier viajero en busca de una estancia encantadora en París!

Iluminación deficiente en la habitación.

Quería explorar París y este hotel era un buen lugar para hacerlo. La comida estaba BUENA.

Ubicación en las inmediaciones de muchos restaurantes y también del distrito de la ópera. Las habitaciones con sofás y una cama doble y también una cuna de bebé.

Pasé aquí 4 noches y tuve una estancia decente. El hotel estaba muy limpio y su ubicación era buena y estupenda en el centro de todo. Habitaciones perfectas y muy limpias con un desayuno estupendo, una bañera, una cama doble, me sentí como en casa. El personal era bueno y encantador aquí. Comida fresca, me ha gustado un montón todo.

Todos eran amables y majísimos. Habitaciones con una bañera. Toda la comida estaba fresca.

Mi estancia en el hotel Windsor Opera fue perfecta. La habitación era cómoda, bien decorada y siempre muy limpia. El personal fue amable y servicial, a pesar de la huelga. La ubicación del hotel es ideal, en una zona tranquila pero con muchos restaurantes cercanos. Además, está cerca de una parada de metro y se puede llegar caminando al Louvre y a Montmartre en poco tiempo. Definitivamente me quedaría aquí nuevamente.

Puedo recomendar este hotel a todos.

¡El personal es complaciente y super agradable!

Una buena cantidad de comida en el desayuno, por ejemplo pasteles, jamón, fruta, queso y también huevos revueltos. El hotel tiene una ubicación céntrica cerca de muchos restaurantes.

Os recomiendo este fantástico lugar a todos los que vayan a París. Hotel cómodo con un restaurante muy bueno en París. Habitaciones sorprendentemente nuevas, con una bañera, y personal increíblemente agradable. Un servicio excelente.

En general, es un muy buen sitio para explorar las atracciones de París. La habitación es de buen tamaño y compacta y tiene una caja fuerte, TV de pantalla plana con canales vía satélite y un refrigerador minibar. Me ha encantado todo, os lo aconsejo.

Personal amable y servicial. Hotel acogedor en una zona tranquila con muchos restaurantes cerca. Cerca del metro y de atracciones como la Opera y Montmartre.

Habitación muy bien decorada y baño con una ducha adaptada. La cama era súper cómoda, y el baño grande. Ubicación muy práctica para ir a las cafeterías y los restaurantes...

Tenía muchas ganas de visitar la Basílica del Sacré-Coeur de Montmartre, así que elegí el hotel Windsor Opera solo por esa razón. Sin embargo, me sorprendió gratamente un servicio que ofrecía el hotel, la lavandería en seco. Además, me encantó la amplia selección de restaurantes, pubs y cafeterías cerca del hotel.

Realmente no hay nada que no me gustara, tal vez el ascensor es pequeño. Pero volvería otra vez y lo recomiendo.

Habitación maravillosa y tranquila con una cuna de bebé, un desayuno excelente y sofás. Está a 20 minutos andando de la estación de tren Châtelet-Les Halles RER.